La vuelta a la rutina después de las vacaciones genera en gran parte de la población una sensación de tristeza, añoranza y falta de motivación que repercute negativamente en el rendimiento laboral. Tras un periodo de relajación, enfrentarse de nuevo a las actividades diarias y a las responsabilidades cotidianas puede generar un problema de depresión en adultos que se conoce con el nombre de síndrome de depresión post-vacacional. ¿Cómo podemos superarlo? Te recomendamos seguir estos cinco pasos para que el regreso a la rutina, tras las vacaciones, sea lo más agradable posible.
1. No volver al trabajo de forma brusca
Querer apurar las vacaciones hasta el último momento es un error, dado que la vuelta a la rutina será mucho más estresante. Por ello, se recomienda destinar un par de días de las vacaciones a regresar a casa y al trabajo para ir asumiendo, de forma gradual, nuestras obligaciones diarias. Un buen truco para que la vuelta al trabajo sea más liviana consiste en dejar terminadas, antes de irnos de vacaciones, las tareas más complejas, organizar perfectamente nuestra agenda para el regreso y dejar ordenado nuestro entorno laboral. Con ello, evitaremos tener que enfrentarnos a un trabajo abrumador cuando regresemos. Empezar nuestra actividad laboral de forma escalonada nos ayudará a que la vuelta al trabajo sea menos traumática.
2. Retomar nuestros horarios habituales
Es importante dormir suficientes horas para que el cuerpo descanse. Un buen descanso siempre tiene un impacto positivo en el estado de ánimo. Además, tras un sueño reparador nos sentiremos con suficiente fuerza para enfrentarnos a nuestra actividad laboral y nuestras obligaciones. Planificar y seguir estrictamente los horarios para comer y dormir, nos ayudará a retomar el ritmo habitual.
3. Seguir una dieta saludable
Debemos desechar por completo los excesos de las vacaciones y seguir una dieta saludable. Comer sano hará que nuestro cuerpo esté más fuerte y que vuelva a recuperar su energía. Conviene evitar el alcohol, ya que acrecienta la sensación de cansancio.
4. Hacer algún deporte
Está demostrado que el deporte y la actividad física actúan como antidepresivos en el cerebro y evitan la sensación de estrés. La actividad física no solo calma la mente, sino que también nos ayuda a retomar mejor la rutina diaria.
5. Planificar una escapada corta
Una buena estrategia para superar el síndrome postvacacional consiste en planificar una escapada corta, en la que volveremos a relajarnos y a disfrutar. Además, nos ayudará a llevar mejor nuestra jornada laboral. En lugar de perder las energías pensando que se han terminado las vacaciones podemos dedicarlas a planificar una escapada corta para el próximo fin de semana.
Siguiendo estos sencillos pasos, la vuelta al trabajo será mucho más agradable y evitaremos la temida depresión en adultos del síndrome post-vacacional. También es importante mirar la vida con optimismo, disfrutando de la familia, los amigos, las aficiones y los momentos de ocio. De este modo, evitaremos caer en la tristeza y en la depresión.