El niño experimenta un nivel de ansiedad elevado ante la separación de su hogar o de sus padres, que se manifiesta en las siguientes situaciones:
Malestar excesivo ante la separación de las personas con quienes el niño está vinculado o anticipación de éstas.
Quejas somáticas cuando ocurre o se anticipa la separación (cefaleas, vómitos, alteraciones gastrointestinales…)
Preocupación persistente por la pérdida de sus figuras de apego o a que éstas sufran un posible daño.
Negativa a ir al colegio, a estar solo o a dormir solo
Pesadillas repetidas sobre la separación.
B. Trastorno de ansiedad generalizada
Ansiedad y preocupación excesiva por una amplia variedad de acontecimientos o situaciones de la vida diaria.
Las preocupaciones, que suelen referirse a la competencia en el colegio, a las relaciones sociales… etc., se acompañan de los siguientes síntomas:
Impaciencia
Fatiga
Dificultad para concentrarse
Irritabilidad
Tensión muscular
Síntomas físicos (dolores de cabeza, dolores de estómago…)
C. Agorafobia
Temor intenso ante determinadas situaciones y lugares de los que sería difícil escapar o pedir ayuda en él en caso de que se presenten los siguientes síntomas: palpitaciones, los temblores, la dificultad respiratoria y el mareo.
Tratamiento
Una vez realizado el proceso de evaluación y detectadas las necesidades del niño utilizaremos estrategias terapéuticas basadas en la terapia cognitiva conductual, tales como relajación, exposición, entrenamiento en autocontrol, manejo de contingencias, relajación y respiración.